Revisitando al renacido Amarok

A finales de abril de 2024 se anunciaba una nueva versión de Amarok, la 3.0. El proyecto, que estuvo "en pausa" desde 2011, vuelve a estar activo.

Acerca de Amarok

Breve historia por parte del abuelo cebolleta

Escuchar el nombre de este programa me devuelve por unos instantes a la segunda mitad de los años 2000. Donde escuchaba música con Amarok 1.4 en un Thinkpad R60 con las últimas versiones de KDE 3 (el desastre de KDE4 estaba ya cerca). Su excelente gestión de la colección de música, su interfaz modular e integración con KDE eran motivos de peso para usarlo como reproductor de audio.

Allá donde se vendían música, los CDs de audio todavía ocupaban un espacio importante. Rebuscaba entre ellos en busca de una buena oferta por un buen disco, fuera actual o clásico, ya que el dinero no sobraba.

Me creé una pequeña colección de unos 50 discos compactos, modesta pero suficiente para mí. Y el ritual era siempre el mismo: desprecintar el disco y ripearlo al formato FLAC. Guardar una copia en un disco externo (mecánico, los SSD no existían), transcodificar esos FLAC a Vorbis, volcar esos OGG a mi colección de Amarok, verificar bien etiquetas (nombre, autor, año, foto de portada), guardar el disco físico a buen recaudo y al fin.. disfrutar de la música.

Amarok fue una de esas aplicaciones QT que destacaban por su potencia y funcionalidad. Junto a otras como KDEnlive, Digikam o Krita

Después llegaría un Amarok 2 (portado a QT4) criticado por muchos, inestable y pesado. El descontento llevó a la creación de algunos forks de la anterior versión. Y el streaming empezaba a tomar fuerza y ser consumido por cada vez más gente.

Los años de tener la música en local se terminaban para muchos. Los reproductores de música en local dejaban de tener sentido.

La versión 2.4.2 fue lanzada en verano de 2011. Y desde ese momento se hizo el silencio.

Hasta la noticia que comentábamos antes, donde se ha vuelto a poner en marcha su desarrollo. Es lo más parecido a querer reformar una casa que lleva años abandonada. Y han empezado por los cimientos: portar la aplicación a QT5 para más adelante portarla a QT6, la versión actual de las librerias en las que se basa la aplicación.

Probando Amarok 3.1

He instalado Amarok en un equipo con ArchLinux y Plasma. El paquete está en el repositorio AUR así que ha tenido que compilarse. 45 minutos ha tardado el proceso, hay que tomárselo con calma. Una vez instalado, tenemos un aspecto idéntico a su última versión de la serie 2.x:

Inicio de Amarok

Disposición de 3 paneles (el panel central vacío, por defecto) y una zona superior con los controles habituales (pista anterior, pausa/reproducir, pista posterior), barra de progreso y control de volumen. Típica de hace 20 años pero hoy en día se nota desfasada.

220 Mb de RAM son consumidos por Amarok, sin añadir música a la colección. Tras añadir unos 6 GB de ficheros Opus a la colección, el consumo aumenta a unos 260 Mb.

Aparte de la música local, hay acceso a un directorio de podcasts, a last.fm y al catálogo de la (agonizante) tienda en línea Magnatune con más de 20000 canciones, repartidas en más de 1900 álbums.

Reproducción de Magnatune

Entre los plugins podemos encontrar el soporte de almacenamiento masivo, por si alguien usa los USB MP3 muy comunes antaño pero ahora barridos por el móvil con streaming.

Y poco más puede ofrecer: las pistas se reproducen sin problemas, el gestor de carátulas funciona correctamente, las notificaciones se integran bien con el sistema... Una aplicación que realiza su función, con un aspecto de otros tiempos. En este sentido tiene ciertos paralelismos con su primo en GTK, Rhythmbox.

Como he comentado antes, los cambios que se están realizando ahora se producen en las "entrañas" de la aplicación, preparando el terreno para una migración a QT6. Además de solventar bugs que ya tenía la aplicación y los nuevos que han salido del paso a QT5. Debe ser un esfuerzo considerable por parte de los desarrolladores.

Ya sólo queda esperar que se produzca la migración a QT6 y pueden centrarse en renovar el aspecto general de la aplicación.

No volverán sus días de gloria, pero para quienes aún tenemos colecciones de música en local, es un reproductor perfectamente válido. Tan icónico como fue para otros el Winamp.

30/09/2024 - Linux